Introducción

Recopilación de descarrilamientos y choques en el mundo citando la fuente y créditos fotográficos. Sitio sin fines de lucro.

Descarrilamiento en Seattle

El tren que descarriló en Seattle (EE.UU.) viajaba con exceso de velocidad 

El tren Amtrak que descarriló el lunes 18 de diciembre de 2017 al sur de Seattle viajaba al doble de la velocidad permitida en el tramo de vía por el que se salió cuando se encontraba sobre un puente elevado al sur de Seattle y sus vagones cayeron a la autopista que pasa debajo causando al menos tres muertos.Las autoridades que investigan el incidente señalaron que el convoy viajaba a 80 millas en un tramo cuya limitación era 30 millas por hora, según los datos de la caja negra situada en la locomotora trasera, indicó en una conferencia de prensa Bella Dinh-Zarr, miembro de la junta de la Oficina de Seguridad Nacional de Transportes.

Foto Reuters/Univisión
De momento, se desconoce qué provocó exactamente el descarrilamiento y según Dinh-Zarr "todavía es demasiado pronto" para saber por qué el tren iba a esa velocidad. El descarrilamiento provocó que varios vagones quedaron amontonados unos contra otros y otro quedó colgado en precario equilibrio sobre la carretera.

Foto AP/Univisión
La portavoz de la policía estatal de Washington Brooke Bova confirmó la cifra de fallecidos y señaló que al menos hay 100 heridos, algunos de los cuales están en estado grave, por lo que "no sabemos si esa cifra cambiará", advirtió. Las vías habían sido reparadas con fondos federales y este lunes se abría al público el recorrido del tren después de semanas de revisiones y pruebas, según informó el Departamento de Transporte en un comunicado.

Foto AP/Univisión
El presidente Donald Trump señaló en un primer mensaje de Twitter que el accidente ocurrido en DuPont demuestra la necesidad de un plan de infraestructuras que instó a que se apruebe rápidamente. Posteriormente, tuiteó condolencias a las familias y agradeció a los equipos de rescate sus labor para asistir a las decenas de víctimas en la escena.

Foto Reuters/Univisión
Tras el siniestro, los heridos pedían ayuda mientras rescatistas -incluidas personas que iban en coche a trabajar por la mañana- acudían a ayudar, contó una de las pasajeras del tren era Emma Shafer, que se encontró en un ángulo de 45 grados mirando a los asientos de adelante, que se habían soltado y dado vueltas dentro del vagón. “Tras el accidente en sí hubo un silencio extraño”, dijo Shafer en declaraciones a The Associated Press. “Entonces empezó a gritar gente porque tenía la pierna destrozada (...) No sé si llegué a oír las sirenas, pero estaban ahí. Un tipo dijo ‘Hola, soy Robert. Vamos a sacarles de aquí”.

Foto Reuters/Univisión
En un comunicado, el FBI dijo que la policía local había sido la primera en llegar y no había información que sugiriera “un riesgo aumentado para los vecinos de Washington”.  La velocidad máxima permitida en la vía baja es de 79 millas por hora a 30 millas por hora justo antes de una curva para cruzar la Interestatal 5, que es donde se salió el tren de la vía, según una tabla preparada por el Departamento de Transportes del Estado de Washington.

Foto Rachel La Corte/AP/Univisión
La tabla, con fecha del 7 de febrero, se envió a la Administración Federal de Ferrocarriles antes de la apertura de un servicio de pasajeros por una nueva ruta que reduce en 10 minutos el viaje entre Seattle y Portland, Oregon. 

Foto AP/Univisión
El tren accidentado es el 501, que recorre la ruta Seattle-Portland. En él viajaban aproximadamente 78 pasajeros y cinco empleados de la ferroviaria, según reportó Amtrak. Tras lo ocurrido, las operaciones hacia el sur de Seattle fueron temporalmente suspendidas. El tramo de la autopista que resultó afectado también está cerrado.

Foto AP/Univisión
Foto Rachel La Corte/AP/Univisión
Foto Pierce County Sheriff's Office/Twitter

Fuente: Web site Univisión y agencias.

Choque en Alemania

Ocurrió en la localidad de Meerbusch el 5 de diciembre de 2017 entre un tren de pasajeros y otro de mercancías que se encontraba detenido.
Un total de 47 personas resultaron hoy heridas, tres de ellas graves, en la colisión de un tren de pasajeros y un convoy de mercancías en la localidad de Meerbusch (oeste de Alemania), cerca de Düsseldorf. Según el recuento final del cuerpo de bomberos de Meerbusch, de los 155 ocupantes del tren de pasajeros siniestrado, 47 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad. 

El suceso se produjo a las 19.30 hora local (18.30 GMT), cuando un convoy regional de la línea RE7 (que une las localidades de Neuss y Krefeld) operado por la empresa "National Express" colisionó contra un tren de mercancías de la compañía DB Cargo que se encontraba parado, informó la Deutsche Bahn (DB), el principal operador ferroviario alemán. Un portavoz de "National Express" aseguró al diario "Bild" que el maquinista "percibió un obstáculo en la vía y accionó inmediatamente el freno de emergencia", para a continuación abandonar la cabina e instar a los pasajeros del primer vagón a que corriesen a la parte trasera del convoy.
Lukas Kehler, un joven de 19 años que viajaba en el tren accidentado, explicó en declaraciones a la televisión regional pública "WDR" aún desde dentro del tren que el fuerte impacto hizo que varias personas de su vagón cayesen al suelo, aunque señaló que no se vivieron escenas de pánico.Las operaciones de rescate de las personas atrapadas en el tren se vieron en un primer momento dificultadas por la rotura del tendido eléctrico, con cables colgando de forma peligrosa sobre el convoy, aunque los técnicos de DB desconectaron la tensión para las 21.15 hora local (20.15 GMT).
A partir de entonces los bomberos pudieron acceder en condiciones de seguridad al interior del tren y ayudar a los viajeros a abandonar el vehículo, que pese al fuerte impacto no descarriló. El propio maquinista fue rescatado ileso, aunque en estado de shock por lo sucedido, destacó la Policía Federal alemana. Al lugar de los hechos se ha desplazado un importante dispositivo de la policía del estado federado de Renania del Norte-Westfalia, así como numerosos equipos de bomberos de la zona y de los servicios de emergencia. El diario "Bild" informó del empleo de un helicóptero para la evacuación de las víctimas.
La canciller alemana, Angela Merkel, sigue con atención la evolución de los acontecimientos relacionados con el siniestro en Meerbusch, aseguró a través de la red social Twitter el portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert. "Esperamos que todos los heridos puedan ser atendidos con prontitud. Gracias por el dispositivo de los equipos de emergencia", escribió el portavoz. El tren de pasajeros pertenece a la compañía National express. La Deutsche Bahn privatizó en estos últimos años varias de sus líneas regionales.
Fuente: Sitios web | Agencias EFE - AFP

Descarrilamiento en España (II)

La pericia del conductor del tren
El conductor esperó al momento propicio para frenar el convoy, que circulaba a entre 120 y 160 km/h, tras cruzar bajo un paso elevado y sortear un talud. La pericia del maquinista del tren que descarriló el miércoles por la mañana en la línea convencional Málaga-Sevilla evitó una catástrofe. Este es el testimonio del interventor que viajaba a bordo del convoy, según informó el secretario general de CGT Andalucía e histórico del sindicalismo ferroviario malagueño, Miguel Montenegro. El técnico de Renfe, que es afiliado de esta formación, puso de relieve que el conductor evitó que el accidente fuera más grave. «Vio que la vía se hundía a su paso, por el peso del tren, reaccionó rápido y lo frenó», aseguró el responsable de CGT. Para ello, tuvo que cerrar con celeridad el regulador de velocidad y accionar el freno de emergencia, aunque aún siguió unos 200 metros por la inercia de la velocidad que llevaba antes de perder el carril.
Una versión en la que coincidieron ayer fuentes técnicas de Adif. Y es que, según la reconstrucción inicial del suceso, el tren diésel de la serie 599 descarriló en el entorno del arroyo de la Alameda, en el municipio de Arahal, donde la vía ya había quedado desguarnecida y sin soporte; por lo que tuvo que sortear un paso elevado para vehículos y un talud, cuya colisión habría resultado fatal. Sobre la velocidad a la que circulaba, a falta de lo que dictamine la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, la Declaración sobre la Red de Adif, que es el documento que especifica las características de todas las vías (actualizada a fecha de este año) estipula que la máxima permitida en ese tramo (bifurcación de Utrera) es de 160 km/h. Sin embargo, debía de ser menor, puesto que venía de un tramo anterior (Osuna-Arahal) que está limitado a 120.
Además, las advertencias sobre la lluvia y el corte que se había producido apenas dos horas antes por balsas de agua hacen suponer que circularía con especial precaución. Como curiosidad, además de los dos trabajadores de Renfe (maquinista e interventor), en el convoy viajaban varios ferroviarios más, empleados de esta compañía y de Adif, que iban como usuarios a trabajar a Sevilla.
En cambio, Montenegro ofrece una versión diferente del origen del accidente. Y es que, asegura, el técnico le explicó que el descarrilamiento se produce antes de llegar a la balsa de agua, en un punto en el que no había barro ni balsas de agua, y es por tanto derivado del mal estado de la vía. El responsable de CGT denunció que las líneas convencionales como están clasificadas como «de tipo B y C», esto es, «de escasa o nula inversión, según la clasificación de Fomento». A lo que añade: «El abandono de Adif y el Gobierno son los responsables de este accidente y de la situación caótica de las líneas convencionales».

Investigación
Adif informó ayer de que el mismo miércoles activó la investigación para esclarecer las causas del suceso. El tramo donde se produjo se encuentra entre El Sorbito y Arahal,  y fue construido por la Junta de Andalucía en 1991. A la espera de las conclusiones definitivas de la investigación interna, que se remitirán a la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios en un plazo de tres meses, los datos conocidos hasta el momento apuntan a que una gran avenida de agua anegó el cauce y descalzó la vía en el punto donde se produjo el descarrilamiento. Esta es la primera vez, desde su puesta en servicio hace 26 años, que en el tramo del accidente el nivel de las precipitaciones provocan una incidencia como esta en la infraestructura ferroviaria. La empresa pública asegura que ha garantizado los reconocimientos de vía estipulados en el Manual de Prevención y Gestión de Incidencias de la compañía, y ha cumplido los protocolos según la clasificación de riesgo de la zona y las alertas recibidas por Aemet.
Fuente: Diario Sur (Malaga-España). Fotos: Salvador Salas

Descarrilamiento en España (I)

Fomento, Adif y Renfe investigan la decisión de permitir el paso por la zona, después de que la línea se cortara a primera hora por balsas de agua.

Sucedió en Málaga el 29 de noviembre 2017, por fuertes lluvias. El accidente se registró en el Km. 19,500, en la misma línea que se había visto afectada a primera hora de la mañana por los efectos de las fuertes lluvias, y que obligó a trasbordar dos trenes por carretera. El Ministerio de Fomento, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y Renfe investigan ahora si fue correcta la autorización para la circulación en un eje donde ya se habían producido incidencias el mismo día. Los pluviómetros recogieron más de 110 litros por metro cuadrado, lo que provocó el desbordamiento del río Guadaíra y de otros muchos arroyos de la zona; así como el corte de carreteras, entre ellas, la A-92.


El suceso se produjo a unos seis kilómetros del que ya había sido cortado entre las 7.45 y las 9.25 por la formación de balsas de agua (entre los puntos kilométricos 25,000 y 25,200) y fue reabierto a partir de ese momento. Apenas media hora después se produjo el descarrilamiento. Este hecho generó un cruce de críticas entre la presidenta de la Junta, Susana Díaz; y el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. La primera exigió a Adif explicaciones sobre la reapertura de la vía «en esas condiciones». De la Serna, por su parte, explicó que la causa había sido el desbordamiento del río Guadaíra, que se produjo una vez recuperado el servicio antes del suceso. El ministro indicó que, a falta del informe de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, «no es imprudente» decir que todo apunta a que ese desbordamiento ha provocado el deslizamiento del tren de la vía. De la Serna afirmó que antes del paso del tren «no existía un problema en este lugar» por las inundaciones y el convoy anterior, en sentido Sevilla-Málaga, pudo cruzar por el mismo sitio sin problemas.


El desbordamiento se produjo «con posterioridad», por lo que no se pudo tomar ninguna decisión para evitar que se hubiese producido el accidente. Por eso, rechazó las críticas de la presidenta de la Junta, al tiempo que reprochó a Díaz que intente «utilizar política y partidistamente este accidente», en vez de ayudar a solucionar la atención a las personas afectadas y la investigación sobre el suceso. Además, le reprochó que no se haya puesto en contacto con el Ministerio ni con el Gobierno «en ningún momento». A las dudas sobre la actuación de Renfe y Adif también contribuye el testimonio de una viajera afectada, Rosario Cañete, quien dijo a la agencia Efe que media hora antes del accidente un revisor avisó en los vagones de que iban a hacer un transbordo en autobús por el mal estado de la vía, aunque luego continuaron con normalidad, 15 minutos después les dijeron que seguiría el viaje hasta Sevilla, y poco después se produjo el accidente.


En cambio, fuentes de Renfe y de Adif enmarcaron este mensaje en la cercanía en el tiempo entre el momento en que se produjo el mensaje del trabajador y el primer corte, que supuso la activación de un plan de trasbordos. Al respecto, recuerdan que Adif «dio vía» a las 9.25 horas, por lo que el mensaje se estaba refiriendo a aquella interrupción anterior, y no a que el trazado estuviera en mal estado en general.
El suceso
El tren de media distancia de la línea convencional que salió de Málaga con destino a Sevilla a las 7.40 horas descarriló en torno a las 10.00 de ayer a unos ocho kilómetros de la estación de El Arahal, entre esta localidad y El Sorbito, en la provincia de Sevilla. A bordo viajaban unos 70 pasajeros. Más de la mitad resultaron heridos, según fuentes del servicio de coordinación de emergencias 112 Andalucía y de la Junta. De ellos, 35 fueron leves y dos graves. El más preocupante era un hombre que sufrió una fractura de pelvis (aunque no se teme por su vida), y que fue trasladado en helicóptero al hospital Virgen del Rocío de Sevilla. El segundo, una mujer de edad avanzada que presentaba diversas fracturas. Su estado no revestía tanta gravedad como el primero, pero su situación y su historial clínico llevaron a un traslado también por medios aéreos, ambos del 061. Un tercero se quedó en observación en el de Bormujos. El resto fueron desplazados por tren a Dos Hermanas, junto a los profesionales sanitarios. Finalmente, la mayoría recibieron el alta, salvo un grupo, que fue distribuido entre diferentes hospitales de la provincia para someterlos a más pruebas.


La riada que afloró súbitamente por una tromba de más de 110 litros por metro cuadrado dejó la vía sin base y es la causa más probable del suceso. Así lo apuntaron a SUR fuentes técnicas consultadas, y la hipótesis fue confirmada posteriormente por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. En el entorno, se produjo una desbordamiento del río Guadaíra, y alguno de sus arroyos fue el que socavó la plataforma de balasto, que se hundió al paso del convoy. El carril se quedó desguarnecido y sin traviesas en un tramo de hasta 100 metros. A consecuencia, la composición circuló el doble de esta distancia con el tercer vagón, que era el último, con un lateral fuera de la vía, aunque no llegó a volcar. Ello produjo una sucesión de fuertes sacudidas, que los testigos describen como un «terremoto».


Adif movilizó un tren taller con base en la provincia de Córdoba para retirar el convoy dañado y reparar la vía, que ha sufrido importantes desperfectos. En tanto permanezca interrumpido el tráfico, Renfe establecerá un plan alternativo de transporte por carretera para los servicios afectados (Sevilla-Málaga y Sevilla-Granada-Almería). Sucesos como el de ayer son muy poco frecuentes. Habría que remontarse a marzo de 2005 para encontrar un caso similar, el de un convoy que descarriló en Antequera tras chocar contra una roca que cayó de una ladera por el temporal. De los 20 pasajeros, sólo dos resultaron heridos leves.

Fuente: Diario Sur (Málaga - España). Fotos Salvador Salas.